La flauta es el instrumento musical más antiguo del que se tiene constancia, hasta el punto de que se han encontrado restos que datan de hace entre 35.000 y 40.000 años en la Jura de Suabia, una sierra de media altura situada en el suroeste de Alemania. Millones de personas las han tocado y siguen haciéndolo en todo tipo de lugares y, probablemente, de circunstancias, pero me atrevo a aventurar que muy poquitas, por no decir ninguna antes, lo había hecho en el espacio. Sí, en el espacio.
Y eso es precisamente lo que ha hecho la astronauta estadounidense Catherine Coleman en la Estación Espacial Internacional, donde se encuentra desde el 16 de marzo como miembro de la Expedición 27 junto con el comandante Dmitry Kondratyev y los ingenieros de vuelo Paolo Nespoli, Andrey Borisenko, Aleksander Samokutyaev y Ron Garan: